En septiembre de este año organizaremos una nueva misión comercial plurisectorial a Nueva Zelanda y Australia. A pesar de la lejanía geográfica, estos mercados con alto poder adquisitivo presentan oportunidades reales que algunas empresas no están dejando escapar.
Australia es el sexto país más grande del mundo. Posee una renta per cápita ligeramente superior a la del Reino Unido, Alemania y Francia, en términos de paridad de poder adquisitivo. Según la OCDE, la crisis global ha afectado menos a Australia que ha la mayoría de países de la OCDE. Australia sigue siendo el centro de los negocios en la región Asia-Pacífico y se utiliza como puente bidireccional entre el sudeste asiático y el resto de países de Oceanía.
El FMI, en su último “World Economic Outlook” (septiembre de 2011), confirmaba que la economía australiana se mantenía en una posición de fortaleza, estimando que crecerá un 3,3% en el 2012. Las últimas previsiones de The Economist (diciembre de 2011) ya situaban la tasa de crecimiento de Australia entre las más elevadas de las economías desarrolladas durante 2011.
En cuanto a los productos más apropiados para exportar a Australia, en el sector agroalimentario es preciso entrar con productos de calidad y con
imagen diferenciada. Los productos orgánicos y gourmet tienen son muy adecuados para este mercado. En el sector de consumo tienen posibilidades los sectores de moda deportiva y calzado, muebles de diseño, accesorios de baño, embarcaciones de recreo, productos de belleza, material de imprenta y textil-confección. En el sector industrial existe potencial para la maquinaria agrícola, material eléctrico y electrónico, los equipos de telecomunicaciones y los componentes de automóviles. Otro subsector interesante es el de maquinaria para la minería. Los equipos relacionados con energías renovables y biotecnología van a ganar peso en los próximos años gracias al compromiso demostrado por Australia con el desarrollo sostenible mediante la ratificación del Protocolo de Kyoto.
Nueva Zelanda es un país de reducido tamaño, aunque con un poder adquisitivo elevado. Existe mercado para los productos de precio alto, porque hay potencial de consumidores interesados en pagar por productos de calidad y diferenciados.
En cuanto a los sectores más interesantes para las empresas gallegas: maquinaria, equipamientos mecánicos, aparatos y material eléctrico destinados a las diferentes industrias manufactureras del país; máquina-herramienta, maquinaria agrícola y herramienta manual; materias plásticas; manufacturas y fundición de hierro y acero. Además, también son relevantes los productos agroalimentarios transformados. Los principales sectores exportadores de España son la industria del automóvil, combustibles minerales, productos farmacéuticos, maquinaria, grasas y aceites, plásticos y papel y cartón.
Llama la atención la presencia relativamente escasa de productos españoles en el sector náutico (embarcaciones, accesorios y ropa), especialmente si se tiene en cuenta que Nueva Zelanda es el país con mayor número de embarcaciones per cápita.