Grecia es considerada de forma prácticamente unánime como la antítesis del modelo a seguir en lo que a la gestión de la actual crisis económica se refiere, si bien las soluciones que se están adoptando y que se pueden prever suponen una revisión de la filosofía espartana predicadora de la austeridad más extrema.
El riesgo es inherente a la actividad empresarial y sólo es posible minorarlo poniendo en la contrapartida un mayor conocimiento previo a la toma de decisiones; los expertos estiman que la reducción de costes es inexorable y urgente, pero todos sabemos que para recortar además de unas tijeras es preciso identificar con antelación qué es lo que sobra, dónde está el exceso prescindible.
Los empresarios, más que nunca, constantemente con el balance de situación y cuenta de resultados a la vista, necesitan un mayor acierto en el momento de definir sus criterios, y desde la Cámara de Comercio ponemos a su disposición una amplia oferta formativa en materia económico-financiera que abarca desde la operativa contable más elemental hasta la analítica de alto nivel.
En definitiva, la gestión empresarial exige sobriedad en el gasto e hilar muy fino en la elección de las partidas al efecto.